Mi fascinación por el arte comenzó en la infancia. Recuerdo pasar horas observando las texturas de las paredes, las formas de las nubes y cómo la luz se reflejaba en los objetos. Sentía una necesidad imperiosa de plasmar todo eso en un papel. Así que, con crayones y acuarelas en mano, comencé a crear mi propio universo visual.
Dibujar y pintar se convirtió en mi refugio, mi forma de expresión y una herramienta para explorar mi mundo interior. A través del arte, podía dar rienda suelta a mi imaginación, expresar mis emociones y conectar con mi lado más creativo.
Con el tiempo, mi pasión por el arte solo se intensificó. Experimenté con diferentes técnicas y estilos, desde el dibujo a lápiz hasta la pintura acrílica. Estudié arte en la universidad y comencé a participar en exposiciones y concursos.
Hoy en día, el arte sigue siendo una parte fundamental de mi vida. Es mi forma de comunicarme con el mundo, de compartir mi visión y de contribuir a la belleza del universo.